Mesa dulce Bosque de Hadas

Un primer cumpleaños es un evento muy importante. Se celebra, nada más y nada menos, todo un año de vida, con sus 12 meses, sus 4 estaciones y sus 365 días. Puede que a esa edad, el/la homenajad@, no se entere muy bien de lo que está pasando pero, cuando pasados los años, eche un vistazo a las fotos podrá sonreír mientras el resto de las personas que estuvimos presentes le contamos anécdotas de aquel día.

Y en las fiestas, la buena compañía es fundamental, pero una buena comida también es imprescindible. Así que, dado que la comida es mi especialidad y que se trataba del cumpleaños de mi sobrina Mariela, decidí prepararle una mesa dulce para festejar esta fecha tan señalada. Para todas aquellas personas a las que les gusta soñar con mundos llenos de fantasía aquí les presento esta mesa dulce Bosque de Hadas.


Tarta, galletas, carteles y demás cosas dulces hicieron un largo viaje para poder estar en Jerez para el cumpleaños. Afortunadamente todo llego en perfecto estado. ¿Queréis comprobarlo? Pues empecemos echando un vistado a las fotos de la tarta Bosque de Hadas.
  

La foto se la hice en casa, antes de salir hacia el lugar de celebración del cumpleaños. Lo hice así porque sino, con el despiste que tengo en lo alto, entre tanto preparativo se me iba a olvidar echar fotos.
Me encantan las setas y las bellotas. Aunque los bichitos también me tienen enamorada 😄 ¿Y qué me decís de la hoja gigante con el nombre? Al final me faltó espacio para poner todos los detalles que quería poner. Y es que cuando estoy inspirada me faltan centímetros de tarta para poder incorporar todo lo que quiero. Pero en las tartas mejor pecar de defecto que de exceso (ya que entonces no se podrían apreciar todos los detalles).


La escalera de piedras es otro de mis detalles preferidos. Aunque lo verdaderamente importante en un bosque de hadas son las hadas, así que aquí os dejo unas fotos para que podáis verlas con más detalle.


No sabría con cuál de las tres quedarme, sin embargo, he de reconocer que la pelirroja que se asoma a la ventana me tiene robado el corazón. A l@s invitad@s parece que les gustó más el hada sobre el tocón. Aunque lo que sí gustó fue el sabor de la tarta: bizcocho de vainilla y crema de cereza. Todo el mundo dijo que le recordaba al sabor de las piruletas 😉

A las galletas de vainilla decidí darles forma de flores y mariposas. Se trata de un bosque, por lo que encajaban a la perfección en el conjunto. Mi único temor era que con la humedad de la zona no se secara la glasa lo suficiente y se rompiera o despegara, pero llegaron a la mesa en perfecto estado. Daba pena comérselas, pero no sobró ninguna.


Los cake pops flores fueron una buena decisión, ya que le dieron a la mesa un toque elegante. Sobre el soporte verde parecían una pradera de flores de vivos colores. Fue una de las cosas que más le gustó a la gente (tanto en sabor como en apariencia). La verdad es que estas piruletas de bizcocho triunfan allá donde vayan. Da igual la forma o el color, que siempre se acaban en primer lugar.


Darle a los cupcakes forma de seta fue una idea inspiradora que resultó en unos divertidos bocaditos. Los más grandes eran de galletas María, mientras que los más pequeños eran de Nesquik de fresa. No suelo forrar los cupcakes con pasta de azúcar pero tengo que admitir que de esta manera quedan mucho más espectaculares.


El conjunto quedó digno de un largo suspiro de admiración (lo sé, no tengo abuela). Pero es que entre la tarta, los cake pops, las galletas y los cupcakes sobre esa hoja gigante de césped, era imposible no dejarse enamorar. Y lo mejor es que todo estaba muy bueno (que es lo que realmente importa cuando se trata de comida).


Y a mi, la unión de música y fantasía, me trae a la cabeza un nombre: Enya. Y es que sus canciones son capaces de evocar mundos lejanos llenos de misticismo. Por eso, para esta mesa fantástica he escogido la canción Amarantine de esta consagrada cantante. Además, el videoclip bien podría inspirar esta mesa de cuento de hadas.

It opens your heart

3 comentarios:

  1. Por fin estás de vuelta, he echado de menos tus creaciones este mes, pero desde luego has vuelto con la cabeza bien despejada y las manos hábiles para modelar. Con esta mesa de bosque de hadas has vuelto a sorprenderme. Me encantan las caritas tan moninas de las hadas, las setas tan molonas y las bellotas, muy de la sierra nuestra.
    En cuanto a la canción, claro, le va de maravilla. Además es tan suave que es inspiradora y da paz al alma, como la magia de las hadas. Sumandolo todo no puedo dejar de decir "¡creo que en las hadas!". María M.

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  2. ¡Ay, ay! si me acabo de dar cuenta de que las bandejitas donde están los cupcakes son de hierba ¡no falta detalle!. María.

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  3. ¡Sí! Platos de césped artificial. Me pareció una idea muy original y la verdad es que quedó muy bonito :)

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